A veces tenemos la idea errónea de que lo inmediato es la mejor opción para hacer las cosas y no nos paramos a pensar que igual cocinar una idea a fuego lento puede salir mucho mejor aunque haya que esperar más de la cuenta.
Esto mismo es lo que se debe aplicar a la hora de analizar el tercer y esperadísimo disco de los norteamericanos Pvris, uno de los combos de rock-pop alternativo más importantes y especiales del último lustro como poco.
Tras un espectacular y sorprendente debut como fue “White Noise”, aquella joya que tenía temazos como “My House”, “Fire”, “Holly” o “St Patrick” entre otros, la banda se convirtió rápidamente en el centro de las miradas de la escena y su vocalista y guitarrista Lynn Gunn, en modelo a seguir para millones de personas no sólo por su calidad como compositora e instrumentista sino también por su aspecto humano que podía verse en las entrevistas realizadas a la banda.
Como decía en 2017 salió su segundo disco “All We Know Of Heaven, All We Need Of Hell” y quizás sea por el “Hype” que generó el debut o porque el cansancio de su mastodóntica gira de presentación hicieron mella en los componentes de la banda, el disco no llegaba a las cotas de brillantez y excelencia adquiridas con White Noise, pero si seguía manteniendo un nivel altísimo y fue bastante bien recibido por público y prensa especializada.
Para este nuevo disco “Use Me”, la banda se ha tomado su tiempo para componer, reflexionar sobre todo tipo de aspectos tanto positivos como negativos y tras 3 años de ausencia ha salido por fin a la luz en todas las tiendas y plataformas digitales del planeta.
Que vamos a encontrar en este nuevo disco, pues en cierta manera una declaración de intenciones por parte de Lynn (dueña absoluta del disco) y sus compañeros de darle un lavado de cara al sonido del grupo pero sin perder su esencia.
Que hayamos tenido que sufrir 3 cambios de fecha debido al maldito Covid19, se podría decir que es un mal menor cuando lo que acabas de escuchar al finalizar el disco es de una brillantez tal que te deja casi sin aire durante unos segundos al no poder creer lo que Pvris acaban de editar.
El disco arranca con “Gimme A Minute”, muy en la línea de su disco anterior con la voz más sentida y diría hasta casi llorando de Lynn que te transmite esa sensación melancólica que tan bien plasman en sus discos, mientras que “Dead Weight” es todo lo contrario con estribillo muy pegadizo que da en la diana desde el segundo uno en que lo escuchas y es la primera pequeña (o gran) muestra de esa intención de evolución que presentan Pvris en este nuevo álbum.
Si bien la anterior canción era una intención de evolución por parte de Lynn y compañía, en “Stay Gold” se plasma directamente y de forma casi perfecta durante sus cuatro minutos de duración que transforman una canción bastante íntima y oscura en una pieza bailable pero sin caer en el cliché de las canciones de este estilo.
Poco podemos decir de “Good To Be Alive”, ya que pudimos escucharla el pasado mes de abril en formato acústico y nos lleno de esperanza cuando estábamos en pleno confinamiento a este lado del charco y lo cierto es que la versión de estudio no difiere mucho de la acústica, es simple va a ser uno de los himnos de este disco antes o después.
Con “Death Of Me” llegamos a una agradable sorpresa para los que seguimos a la banda desde la era “White Noise” ya que esta canción podría haber estado perfectamente incluida en dicho álbum ya sea en el tracklist original o en alguna edición extranjera, es sin duda una de las mejores piezas del disco y es muy posible que sea de las favoritas del público por lo que representa y porque el poderío vocal de Lynn está a años luz de muchas de sus compañeras de profesión, esta chica tiene en la voz ese “algo” que otras no tienen por muy buenas letristas que sean y por mucho que nos gusten sus canciones.
“Hallucinations” y “Old Wounds”, sirven de puente entre lo ofrecido anteriormente por Pvris y lo que quieren ofrecer en esta nueva etapa, no distan mucho de las piezas que llevamos analizadas pero si hay que destacar una sería “Old Wounds” por lo emotiva que es y por lo atrapante que resulta la voz de Lynn en la canción, que esté en medio del disco no es casualidad, no se está despidiendo de su anterior etapa sino sumándole a la nueva elementos que ya ofreció en sus dos primeros discos.
Pero Pvris también saben despojarse de elementos que la canción no necesita si eso implica hacer un buen tema , este ejemplo lo tenemos personificado en “Loveless”, quizás un tema más simple y menos sombrío que otros del disco pero que al final nos muestra la cara más cruda, honesta y vulnerable de la banda y eso nos llega dentro y se nos clava cual puñal afilado en el estómago.
El disco se va acercando a su fin, no sin antes dejarnos “January Rain”, con ciertos toques de hip hop mainstream pero sin perder el toque oscuro de sus habituales composiciones, quizás requiera alguna escucha de más antes de poder apreciarla como corresponde algo que no sucede con la siguiente pieza titulada “Use Me”, que da título al disco y que cuenta con la colaboración de la artista de hip hop Daniella Balbuena o como todos los que nos gusta el género la conocemos mejor que es 070 Shake, ambas cantantes se complementan a la perfección y la pieza cuenta con sonidos industriales y arreglos de cuerda que la hacen de lo más interesante dentro del disco.
Para acabar Pvris nos dejan una pieza desgarradora como es “Wish You Well”, que sirve para despojarnos de todo aquello que nos hace mal o sentir tristes y melancólicos e intentar abrirnos paso en una nueva era.
Poco más podemos destacar en estos 40 minutos que se pasan como un suspiro y a la vez hay que analizar con calma y poder apreciar el nivel de honestidad y brillantez que la banda ha alcanzado en este nuevo trabajo que si bien se ha hecho de esperar bastante…quizás demasiado, al final logra su propósito que es envolverte con sus composiciones y dejarte pensando en cual será el siguiente paso en la carrera de la banda, de momento este es un paso muy firme hacia adelante y de manera muy notable.
Lynn ha vuelto y se ha hecho con las riendas de la banda, no te pierdas todo lo que tiene que ofrecer en “Use Me” que no es poco y cuyo resultado es magnífico.
Por: Lucas Capeluto