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Nos toca hoy reseñar el último trabajo de Sydney Sprague. La cantautora tejana presenta su segundo LP “Somebody in Hell loves you”. Tras unas cuantas escuchas podríamos decir, que en esencia, es este un trabajo sentimental e introspectivo. Podemos encontrar en él cierta herencia del espíritu del pop rock de comienzos de siglo, corriente ( y sonido) que parece bastante olvidado en estos tiempos.
Sea de forma consciente o no, el álbum bebe claramente de esos sonidos que protagonizaron los albores de los 2000.
Se escribió este álbum (como muchos de los que se están estrenando ahora) durante los claustros pandémicos, cuando parecía que la película hubiese terminado y estuviésemos presenciando unos perpetuos títulos de crédito, que nunca llegaban a su fin.
Es quizá por eso, precisamente, que estos temas parecen hechos para disfrute de la autora, y es eso también lo que les da ese toque tan especial y genuino.
Un ruido amortiguado a través de un altavoz, nos recibe antes del tema que abre, I’m Honest, corte repleto de guitarras vibrantes y baterías ruidosas. Es un tono que nos está indicando una mezcla entre el dejar ir y el seguir adelante. Una mezcla entre el Show Must Go On y el saber quedarnos con lo importante del pasado.
Cuando, unos minutos más tarde, aparece Smiley Face apreciamos un cambio. Es aquí donde se nos muestra la vertiente más Indie Rock de Sydney Sprague.
La lírica y bella melodía del estribillo, lleva el optimismo existencialista, typical post pandemia, y aún se siente la euforia y cierta vitalidad luminosa.
Nobody Knows Anything es casi una secuela de Smiley Face, pero con un tempo algo más tranquilo, unos bajos neblinosos y un riff etéreo y en bucle. Ciertamente hipnótico.
Otro tema que me llamó bastante la atención fue Closer Sketching Lessons. Este tema es como una carta a los Reyes para nuestro niño interior (“..todo va a ir bien chaval.. y si no, fingiremos que así es..”) canta sibilinamente Sydney..
Es un trance suave. Es como estar dentro de un recuerdo. Como Pesadilla en Elm Street pero con algodón de azúcar.
En definitiva, es este “Something in hell loves you” un conjunto de joyitas personales, que irradian luz, y todo en un tono muy Healthy .(no lo busquéis, saludable)
Escrito en un cuarto y ensayado en un garaje. Es un péndulo constante entre lo femenino, luminoso y bonito y lo puntiagudo, cortante y gruñón.
Son canciones del encierro.
Del corazón al garaje..
Texto: Edu Conde España
English
Today we are reviewing the latest work by Sydney Sprague. The singer-songwriter from Texas presents her second LP “Somebody in Hell loves you”. After a few listens we could say that, in essence, this is a sentimental and introspective work. We can find in it a certain inheritance of the spirit of pop rock from the beginning of the century, a trend (and sound) that seems to be quite forgotten these days.
Whether consciously or not, the album clearly drinks from those sounds that starred at the dawn of the 2000s.
This album was written (like many of those being released now) during the pandemic cloisters, when it seemed as if the film had ended and we were witnessing perpetual credit titles, which never came to an end.
Perhaps that is precisely why these songs seem to be made for the enjoyment of the author, and that is also what gives them such a special and genuine touch.
A muffled noise from a loudspeaker greets us before the opening track, I’m Honest, a cut full of vibrant guitars and noisy drums. It’s a tone that’s signalling a mix between letting go and moving on. A mix between Show Must Go On and knowing how to keep the important things from the past.
When, a few minutes later, Smiley Face appears, we notice a change. It is here that Sydney Sprague’s Indie Rock side is revealed.
The lyrical and beautiful melody of the chorus, carries the existentialist optimism, typical post pandemic, and you can still feel the euphoria and a certain luminous vitality.
Nobody Knows Anything is almost a sequel to Smiley Face, but with a slightly calmer tempo, hazy basslines and an ethereal, looping riff. Certainly hypnotic.
Another track that really caught my attention was Closer Sketching Lessons. This track is like a letter to the Kings to our inner child (“…everything is going to be alright kiddo…and if it’s not, we’ll pretend it is…”) sibilantly sings Sydney….
It’s a soft trance. It’s like being inside a memory. Like Nightmare on Elm Street but with candyfloss.
In short, this “Something in hell loves you” is a set of personal jewels, which radiate light, and all in a very Healthy tone (don’t look for it, healthy).
Written in a room and rehearsed in a garage. It is a constant pendulum between the feminine, luminous and pretty and the sharp, cutting and grumpy.
They are songs of confinement.
From the heart to the garage.
Text: Edu Conde España