Con una amplia carrera en el mundo musical, el grupo originario de Bizkaia Kartzarot llevan desde los años 90 en activo, y desde entonces han tenido una trayectoria desigual durante esta larga andadura. Se separan a finales de esta década tras tres demos publicadas (dos propias y una última compartida con otra banda) y se vuelven a unir en 2013.
A partir de ahí, parece que lo vuelven a coger con ganas y tras algunos cambios como nuevas incorporaciones al grupo, se reeditan en CD los antiguos trabajos de la banda y la edición un poco más tarde de una nueva grabación compuesta por 7 temas en 2015.
Ya en la actualidad, vuelven a grabar este nuevo trabajo compuesto también por 7 temas bajo el nombre de “L”, en los Chromacity Estudios. Y de él vengo a hablaros.
Nos traen un disco llenito de hard rock, que nos recuerda a las más míticas bandas del género de hace unas décadas, pero con un toque que consigue que suene muy actual. Un trabajo fácil de escuchar, entretenido, potente, lleno de riffs y punteos, como debe ser en este estilo tan suyo.
Eso sí, creo que aún no lo había dicho: cantan en euskera, lo que hace que suene aún más potente, tan acostumbrados como estamos al heavy y hard rock en inglés o en castellano.
Menos mal que nos cuentan de qué tratan sus temas, porque yo personalmente poco os podría decir ( a mí no me saquéis del mila esker o el ondo pasa que me han enseñado mis amigos porque el euskera me parece un idioma dificilísimo jejeje). En sus letras tocan temas tales como las agresiones sexistas (ojalá llegue el momento en el que no haya que hablar de ellas porque no existan), la marginación laboral, el alzheimer, y otros temas como la ecología y el futuro…Y, por supuesto, el fútbol, que no falte!
Incluso tenemos una balada (Lezama) que rompe el ritmo rápido del disco para sumergirnos en ella y continuar con un siguiente tema que poco a poco va aumentando el ritmo hasta devolvernos a su enérgico sonido.
Incluyen también un tema como bonus track (“Train”, por cierto, temazo) cantado en 3 idiomas (euskera, castellano e inglés) que cierra el disco en modo de despedida. Pero despedida de verdad, ya que ellos mismos nos comunican su más que probable despedida de los estudios de grabación. Esperemos al menos poder volver a verlos en directo algún día (si volvemos a la normalidad y nos dejan).
Por: Mamen Rodríguez