[Crónica] Los putos amos y los putos reyes se reúnen en Asturias con Loncha Velasco y Bourbon Kings

¿En qué piensa la gente? Pocos fuimos los afortunados de poder ver el pasado viernes un bolazo como el que dieron Bourbon Kings  y Loncha Velasco en Oviedo. Y es que, a pesar del irrisorio precio de las entradas (7 euros anticipada), la ausencia de público se notó desde el principio hasta el final del bolo. Pero no por ello las bandas dejaron de darlo todo, porque fue un CONCIERTAZO, así, en mayúsculas.

Comienzan Bourbon Kings, con toda su actitud y toda su parafernalia. Como rezaba la camiseta de su vocalista, “This is my attitude”. Y es que los navarros se salieron. Con su mezcla de rap metal- nu metal nos encandilaron a todos desde los primeros acordes, desde los primeros samplers, tanto por su música como por su talante. Se marcaron 13 temazos entre risas y discursos, enormes sus temas propios y gran  elección de versiones. Regalaron bourbon al público al ritmo de “Jump Around”, que por algo son los Bourbon Kings, nos hicieron saltar, bailar e incluso hacer un mini wall of death. Flipamos con versiones como “Smack my bitch up” de Prodigy y “Take a look around” de Limp Bizkit, y es que Bourbon Kings son “Puro fuego”, como el que baja por tu garganta cuando te tomas uno.  Divertidos, arrolladores, indomables… Todo lo que os cuente se queda corto.

Continúa la noche y sigue sin aparecer más público. Yo sigo diciendo: “¿qué cojones hace la gente?”. Sigo sin entenderlo. Que es viernes, joder… 

Turno de los malagueños Loncha Velasco, diversión asegurada. En mi caso, su acento al hablar eclipsaba todo lo demás.  Vivir lejos de tu tierra es lo que tiene, así que se agradece enormemente cuando una banda andaluza viene a tocar al norte.  ¡Venid más, cabrones!. 

Bueno, a lo que iba, que me voy por los cerros de Úbeda. A pesar de llevar otro batería (21 añitos y el chico se había aprendido los temas en dos días, ojo ) y que tocara el bajo el que realmente era guitarra del grupo, no se dejaron acobardar. Mucho cachondeo y diversión, sin dejar de lado el componente político. Risas con temazos como “Mi abuela se ha hecho Tinder”, donde el DJ apareció con un camisón pretendiendo ser una abuela cachonda aunque parecía más bien que acababa de salir de un  manicomio. Compromiso social y político con “Siria”, y una versión realmente mejorada de “Puto” de Molotov en la que cambian aquella odiosa frase que no voy a repetir por “matarile a los de Vox”. Así sí. Pildorazos también a la monarquía, cuando su vocalista apareció con una capa de armiño, corona y una camiseta con el lema “Lo siento, me he equivocado, no volverá a ocurrir”, y para terminar con  temas como  “En el fondo es por la pasta” y “Gatillazo”. Una extensa gira que esperemos que en otros lugares les haya ido mejor porque, realmente, Loncha Velasco son los putos amos. Y punto.

Y a los que no vinisteis… No podréis saber lo que os habéis perdido. Como ya dije, BOLAZO, en mayúsculas. 

Texto y Fotos: Mamen Rodríguez