IV GASTEIZ IN METAL
IRON SAVIOR + AIRBORN + MONASTHYR + AEROSCREAMER
Vitoria-Gasteiz, 10 de Diciembre.
Empezaba la noche con mi primera caña y salían a escena los Aeroscreamer. Un grupo local, de Vitoria-Gasteiz, que yo no conocía. Heavy metal clásico, con arreglos de teclado con sonido ochentero y clarísimas influencias de los clásico más clásicos; royo zepelín, sobre todo en sus partes más lentas. Disfrutaron del mejor sonido de la noche, hasta que salieron los cabezas de cartel. Voz femenina y juventud entre sus integrantes, que dieron un buen show que se hizo corto en apenas 30 minutos. El único pero es la canción lenta con piano y voz que me dio bajonazo. Cuando dispones de tan poco tiempo tienes que ir a lanzar tu energía a tope. Hay que seguir de cerca a estos chavales, que prometen.
Los Monasthyr aparecieron en escena y empezaron con la tralla. Son un grupo asturiano de power metal que juguetea con los ritmos progresivos de vez en cuando. Comentaron que traían al batería con tres ensayos, pero la verdad es que no se notó para nada. Gran calidad y tablas. Se echó de menos un poco de “punch” en los estribillos. Es decir, al no haber coros ni teclados, ni nada… pues las canciones quedaban un poco planas y en ocasiones se quedaban planas, aunque disfrutables. Conectaron con el público y lo hicieron cantar. El sonido fue un poco peor que en el grupo anterior y la audiencia percibía un poco de barullo. Poca nitidez. Una pena. En líneas generales un buen show. Muy recomendable.
Llegó el turno de Airborn. Recuerdo tener discos de esta banda cuando empezaban. Cuando no podías oír un disco si no lo comprabas o lo tenía un colega. Entonces aparecieron en las revistas como “si te gusta Labyrinth…”, y claro Labyrinth acababa de sacar el “disco rosa” y estábamos flipados. Así que tengo un par de CDs de cuando empezaban, hace unos veinte años, pero después les perdí la pista. Es este show me dieron una impresión muy “Freedom Call”. Melodías alegres y buenrollismo a raudales. El cantante contando que aprendió castellano leyendo a Mortadelo nos ganó. Lamentablemente tuvieron el peor sonido de la noche y lo que os llegaba era un barullo total dónde era muy difícil discernir riff, grito, voz, bombo, o melodía alguna. Según avanzaba el show se nos iba haciendo bola. Al final nos regalaron un par de clásicos. Y se marcharon dejando un show digno, pero peor que el de Monasthyr, no lograron enganchar a la audiencia.
Esperábamos con ansia que empezase el show de Iron Savior, sin embargo el batería estaba mariconeando para aquí y para allá. No parecía estar cómodo con el set. Muevo este plato un centímetro para Paqui… muevo esto otro un poco para allá… en fin. Cuando parecía estar todo listo; empezaron los Iron Savior. La verdad que el sonido fue el mejor de la noche y se escuchaban perfectamente las dos guitarras, la batería, las voces, pero sobre; todo un bajo bestial. Empezaron el primer tema y lo pararon a la mitad. Desconcierto general. El batería no está cómodo y vuelve a mover todo el set… Piet se disculpa en el micro… pero a estas alturas ya nos cae mal el batería a toda la audiencia.
Reempieza el show. Un Set list bien elegido, sobre todo con temas del Skycrest y el Kill or Get Killed. Los germanos rara vez fallan y tienen un show demoledor. La voz correcta y todo funciona como debe. El batería sigue entre canción y canción cambiando cosas y quejándose. Apretando historias y moviendo el set. Hasta que no empezó la sexta canción, antes de la cual le pusieron un rollo de cinta americana por ahí en el suelo, no paro quieto. Todos estos problemas lastraron un poco el ritmo del show con mucho tiempo entre canción y canción en su primera mitad. De aquí para delante todo fue como la seda.
Para terminar nos regalaron Atlantis Fallin, la primera canción de su primer disco, allá por el 97, y luego una versión de los Judas. La gente lo paso bien pero mira que tiene canciones Judas para que vayas a tocar Breaking the Law… tío Piet… En fin, terminamos con ambiente festivo y la audiencia encantada.
FOTOS
Texto y fotos: Pablo Balaustrada